San Miguel Arcángel es uno de los siete espíritus que están ante el trono de Dios, y el líder de los ejércitos celestiales. Su nombre significa “¿Quién como Dios?”, frase que pronunció al enfrentarse a Lucifer durante la rebelión de los ángeles.
Su papel en las Escrituras es fundamental:
Desde los primeros siglos del cristianismo, San Miguel ha sido venerado como defensor de la Iglesia y protector de los fieles.
La imagen de San Miguel Arcángel es rica en simbolismo y muy reconocible:
En el arte, se le representa como caballero medieval, general romano o joven alado, siempre en actitud de combate o justicia.