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Los orígenes
Los orígenes de esta zona se remontan al Neolítico. Se han hallado varios yacimientos
Este territorio se trataba de una zona de paso comercial entre el asentamiento fenicio de Baria (Villaricos) y el resto de poblaciones del sudeste peninsular.
Los romanos en Albox
Poco o nada se sabe del papel que desempeñó Albox durante la época íbera y romana. Seguramente sería un lugar de paso entre Cartago Nova (Cartagena) y la Bastetania.
Los árabes en Albox
La fundación del núcleo urbano de Albox se debe a los árabes. Significa “la torre”.
Dado a su situación fronteriza entre los reinos de Granada y Murcia, fue sometida a varios ataques de las tropas cristianas. El castillo de Albox era un punto estratégico en la zona.
La Reconquista
La población pasó de manos en varias ocasiones durante el siglo XV, hasta que en 1488 se rindió finalmente a los Reyes Católicos.
Inicialmente las tierras fueron concedidas al Duque de Nájera, que en 1499 las vendió y pasaron a formar parte del marquesado de los Vélez.
El siglo XVI está marcado por un terremoto que devastó la población. Se desmanteló el castillo para poder reconstruir la población con sus piedras.
Como en muchas otras poblaciones, las revueltas entre cristianos y árabes se sucedieron durante el siglo XVI, hasta que se decretó la expulsión de los moriscos y la progresiva sustitución de la población con cristianos viejos de Castilla y el levante.
En 1563 Albox se constituye en concejo municipal.
En el siglo XVII, integrado como parte del marquesado de los Vélez, se experimenta un crecimiento económico importante.
A finales de este siglo, una epidemia de fiebre amarilla asola la población.
Edad moderna
El siglo XVIII dio comienzo crecimiento económico del municipio, donde pasa de ser un núcleo de escasa entidad a una de las poblaciones más dinámicas y activas del valle del Almanzora y del Marquesado de los Vélez. Esta época de esplendor y crecimiento viene generada por el control los acuíferos en forma de fuentes naturales de agua, desembocando en una agricultura que genera excedentes. Esto causa la aparición de una pequeña burguesía, y el fomento de comercio en la zona.
Un suceso muy importante para Albox ocurrió en 1716, cuando dos presbíteros albojenses fundan una ermita en el monte Roel y comienza la veneración de la imagen de Nuestra Señora del Saliente. Esta ermita se va ampliando hasta convertirse en impresionante santuario. Desde esa fecha, la veneración a la patrona está muy arraigada entre la población.
Durante este siglo la población experimenta un gran crecimiento, pasando de 488 a casi 5000 habitantes.
Albox fue escenario de varias escaramuzas durante la guerra de Independencia, en 1810.
En el siglo XIX la actividad comercial se consolida, con la creación del mercado de ganado que llega a convertirse en uno de los mas importante España, y que ha dado lugar a lo que hoy se conoce como la feria de Albox. En la ciudad se crean más de 300 telares, otros tantos alpargateros, crece de gran forma la producción alfarera. También la extracción y manufacturado del travertino amarillo cobra gran importancia.
A consecuencia de esta intensa actividad comercial en el sureste español (Baza-Albox-Lorca), toma importancia la figura del arriero, que aprovechaban ese gran mercado para transportar las mercancías de una población a otra con los carruajes tirados por burros.
Por desgracia, el siglo XIX también viene marcado por varias epidemias y catástrofes naturales, como la riada que en 1891 devastó gran parte de la población.
Una figura importante para la recuperación del municipio fue Manuel de Eguilior y Llaguno, el cual dedicó recursos a reconstrucción de la villa y la canalización de la rambla para evitar futuras catástrofes. Por su implicación, le fue concedido el título de conde de Albox.
Actualidad
La primera mitad del siglo XX la ciudad intenta recuperarse de las catástrofes sufridas, pero el estallido de la guerra civil supone un freno en el desarrollo.
A pesar de que un número importante de albojenses emigraron a otras regiones de España (principalmente Cataluña) durante los años 60 y 70, la población ha seguido creciendo y desarrollándose.
Los arrieros con sus burros han dado paso a los actuales transportistas con camiones de gran tonelaje. Un gran número de empresas de transporte radicadas en Albox transportan los productos almerienses por toda Europa.
El comercio textil, la alfarería y la alimentación son los otros pilares sobre los que se sustenta la economía del municipio.
Actualmente Albox es uno de los municipios más activos del valle del Almanzora, contando con casi 12000 habitantes.