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Miguel Pineda Montón
| Miguel Pineda Montón | |
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| Pintor | |
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| Año de nacimiento: | 1828 |
| Lugar de nacimiento: | Adra |
| Año de fallecimiento: | 1901 |
| Lugar de fallecimiento: | Madrid |
Pintor de género, caricaturista y litógrafo. Realiza sus estudios en la Escuela de Bellas Artes de Granada, completando su aprendizaje en la Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid.
Su carrera artística en el plano profesional se inicia en Granada, como grabador y litógrafo a finales de la década de los 40. Hacia mediados del siglo XIX se convierte en uno de los principales ilustradores de revistas como El Álbum Granadino, La Revista Literaria Granadina y El Liceo. Como grabador abarcó todos los medios y sistemas, desde la talla en madera a la litografía, pasando por los metales. En 1850 se convierte en miembro de la sociedad artístico-literaria La Cuerda Granadina, donde es conocido con el sobrenombre de Vílchez.
A mediados de los años 60 se traslada a Madrid, donde colabora con varios establecimientos litográficos, como grabador dedicado a la ilustración de libros.
Entre 1875 y 1877 formó parte de una sociedad de artistas cuyo objeto fue publicar la colección de láminas El grabador al aguafuerte, una colección de obras originales y copias de los más selectos pintores españoles, especializándose Pineda en reproducir obras de Velázquez.
Como pintor cultivó el tema paisajístico y costumbrista, y se especializó en el retrato. Por su pertenencia al Ateneo Científico y Literario de Madrid, recibe el encargo de pintar varios cuadros de presidentes y socios ilustres, como es el caso de los dedicados a Nicolás Salmerón, a Julián Sanz del Río y Antonio García Blanco.
Participó en las exposiciones nacionales de pintura de 1871 (una obra), 1887 (tres obras), 1890 (tres obras) y 1897 (dos obras). Pineda se prodigó como pintor de reproducciones de cuadros clásicos y paisajes, entre los que destacan El triunfo de Baco y Lonja de Valencia, obras que acabaron en subastas millonarias en París y Londres.
Como miniaturista-retratista se le conocen varias obras: Retrato de la Reina Doña María Cristina de Borbón y otro del Duque de San Lorenzo. Desde 1869 a 1901 simultaneó su trabajo como litógrafo y pintor con la docencia, siendo profesor de Bellas Artes en varias ciudades españolas. Se jubiló como profesor numerario de Dibujo Geométrico de la Escuela Superior de Artes e Industrias de Madrid.