De azur, la torre, de plata, acompañada de dos vasijas de oro.
Al timbre, corona real abierta.
La figura central del escudo hace referencia a la decena de torres vigía que salpican la costa nijareña.
Asimismo, una de ellas, domina el paisaje de la villa de Níjar y da nombre al barrio más antiguo de la capital del muni- cipio: La Atalaya.
Las dos figuras que flanquean a la torre, simbolizan el trabajo alfarero de larga tradición en toda la comarca.