Hervir los pimientos, la cebolla y los dientes de ajo, triturar y añadir una pizca de pimentón picante. También se le pueden añadir una semillas de comino y algo de vinagre. Si queda muy solido añadir agua de la cocción y emulsionar con aceite de oliva.
Se limpian de semillas los pimientos, se corta la cebolla en juliana fina. Se cortan los tomates uno a trozos pequeños y el otro en cuatro trozos, se pelan los dientes de ajo.
A continuación se pone una olla al fuego con el agua, dos pimientos troceados groseramente y los otros dos enteros, la cebolla, los tomates, el laurel, el perejil y un poco de sal, incorporando también un chorrito de aceite.
El preparado se lleva a ebullición y se cuece muy poco tiempo, unos 10 minutos aproximadamente. Mientras tanto, en un mortero se majan los cominos, los granos de pimienta y los dientes de ajo.
Se sacan de la olla los dos pimientos enteros y con un cuchillo o una cuchara le quitamos la carne y la echamos en el mortero. Sacamos también los trozos de tomate más grandes, les quitamos la piel y también los agregamos al mortero. Majamos todo muy bien e incorporamos un poco de aceite agregándolo en hilillo fino y batiendo como si de una mahonesa se tratase. Seguidamente pasamos a la olla el contenido del mortero, arreglamos de sal y el pimentón estará listo para ser utilizado.
A este mismo caldo, en toda la Sierra de los Filabres, se tiene la costumbre de agregarle unas almendras majadas.
recetas/segundos/caldo_colorao.txt · Última modificación: 07/02/2025 04:09 por bastetani