Cortamos las costillas en trozos, y el lomo en 2 o 3 tacos grandes y le ponemos sal, pimienta y canela molida.
Las pasamos a un recipiente adecuado y las dejamos macerar unas horas en el frigorífico.
Entonces, en una sartén, echamos la mitad de la carne, la mitad del aceite y de la manteca.
Empezamos a freír las costillas pero sin que lleguen a dorarse del todo.
Las vamos sacando y echando a una orza de barro.
Seguidamente, agregamos también esta grasa de freír y cubrimos las costillas.
Ponemos otra vez aceite y manteca y terminamos de freír la parte que nos quede. El motivo de hacerlas en dos veces es para que la grasa de freír no llegue a ponerse negra.
La última capa de costillas se dejará cubierta por completo con la grasa.
Y después ponemos la orza en un lugar fresco. No necesariamente en el frigorífico, porque la manteca hace de conservante.
Lógicamente la grasa se solidificará y cuando decidamos comernos unas costillas o un trozo de lomo cortado en láminas, calentaremos su propia grasa.
recetas/segundos/lomo_y_costillas_de_cerdo_en_manteca.txt · Última modificación: 24/12/2020 08:45 por bastetani