La devoción a esta imagen en Bacares se remonta a siglos atrás, cuando, según la tradición, la imagen del Cristo se apareció en un paraje boscoso cercano al pueblo, protegiendo a sus habitantes de una amenaza inminente.
La talla original fue destruida durante la Guerra Civil, pero en el siglo XX se encargó una nueva imagen a artesanos de Baza, conservando la pierna izquierda de la escultura original como símbolo de continuidad y memoria.
Cada 14 de septiembre, Bacares celebra con fervor la festividad del Santo Cristo del Bosque. Miles de peregrinos, muchos de ellos descalzos en señal de promesa, acompañan la imagen en procesión desde su santuario hasta la ermita del paraje donde se produjo la aparición. La plaza se llena de fieles entre lágrimas, vivas y plegarias, en una muestra de fe que se renueva año tras año.
La imagen del Santo Cristo del Bosque está cargada de simbolismo y emoción:
La imagen se custodia en el Santuario de Santa María.